Aumento de rendimiento visual


Los factores que influyen sobre el rendimiento visual son la capacidad visual del individuo, la visibilidad de la tarea y los factores generales que le rodean. Cuando estos factores se encuentran afectados puede aparecer la “fatiga visual”, que minimiza el rendimiento del sujeto.

La fatiga visual se produce por ineficiencias visuales o por síntomas relacionados con la visión, causados por una combinación de anormalidades visuales del individuo y ergonomía visual inadecuada. Los problemas ocurren siempre que las demandas visuales propias de la tarea exceden las capacidades del sujeto.

La fatiga visual puede incluir quejas de dolor ocular o periocular, picazón o ardor, lagrimeo, cambios oculomotores, problemas focales, degradación del rendimiento, fotofobia y otros fenómenos. La “astenopía”, otro término que se usa para fatiga visual, se caracteriza por dolor, cefaleas, molestia o fatiga en los ojos entre otros.

Mediante un exhaustivo examen optométrico, el óptico-optometrista detecta y analiza estos factores y recomienda y educa, evaluando las habilidades visuales y los hábitos que pueden estar fallando y buscando la solución más adecuada a cada caso.